viernes, 3 de julio de 2015

Adjetivos


Los Sustantivos



Los sustantivos son palabras cuyos referentes son clases de entidades fijas (a diferencia de los pronombres cuyos referentes son contextuales), no estados de hechos o relaciones gramaticales. Los pronombres personales en cada contexto tienen un referente pero este cambia de contexto a contexto ("yo" no tiene referente fijo sino que depende de quien habla), por su parte los verbos designan estados de hechos, procesos o relaciones entre entidades, mientras que las preposiciones generalmente indican relaciones abstractas. Sintácticamente los sustantivos funcionan como núcleos de sintagma nominal, es decir, como argumentos del verbo o complementos del nombre.

En español, al igual que en las demás lenguas romances, los sustantivos son variables en género y número, mientras que en otras lenguas, el chino por ejemplo, los sustantivos son invariantes. La mayoría de las lenguas conocidas distinguen sistemáticamente entre sustantivos y verbos, teniendo propiedades formales diferentes. Sin embargo, esta distinción tampoco es universal, ya que algunas lenguas como el náhuatl o lenguas salish como el lummi o el kalispel no parecen distinguir consistentemente entre ambas categorías y las formas que funcionan como sustantivo también aceptan flexión verbal.



Los Verbos




Los verbos los podemos definir como palabras que denotan acciones, estados y también procesos.
Siempre constituyen el núcleo de todos los predicados. Los verbos denominados conjugados señalan persona: primera, segunda o tercera, y número gramatical como por ejemplo: singular o plural que generalmente coincide con el sujeto de la oración.
Los verbos tienen 5 tiempos simples en el caso del modo indicativo presente, pretérito, futuro, copretérito, pospretérito. Los del modo sustantivo tienen 3 simples.

El lexema o raíz se mantiene fijo en los regulares y va modificándose en los irregulares. Algunos de los verbos regulares más empleados son: trabajar, beber, vivir o aprender. Entre los irregulares estarían: contar, oler, oír o poner.
Si decimos que un verbo es regular esto implica que sigue un patrón, un mismo esquema. En consecuencia, es más fácil emplearlos en sus distintas formas. Los irregulares no están sujetos a una pauta o modelo, van cambiando. Así, resulta más difícil conjugarlos correctamente y es frecuente cometer errores al emplearlos; sobre todo si el hablante es extranjero y no está familiarizado con el idioma.
 



 

Sujeto y Predicado


 
 
Partes de la Oración.
La oración está compuesta por dos partes el sujeto y el predicado. La persona, cosa, animal de quién decimos algo es el sujeto. Ejemplo (Las setas crecen en el campo)
El sujeto de una oración es un grupo nominal  formado por una palabra una palabras o grupo de palabras.
Para reconocer el sujeto de una oración preguntamos al verbo ¿Quién? ¿Quiénes?
Ejemplo La directora de mi colegio conoce muy bien las setas.
Existen dos tipos de sujeto el sujeto léxico está formado por el grupo nominal que en la oración realiza las funciones del sujeto.
El sujeto gramatical que está formado por la persona y el número de forma verbal.
Lo que decimos del sujeto es el predicado.
Ejemplo: Las setas crecen en el campo.
A veces el predicado de una oración es una sola palabra.
Los actores ensayan.
En estos casos, la palabra que forma el predicado es siempre un verbo.
Otras veces, el predicado de una oración está formado por varias palabras.
Ejemplo: Los actores ensayan varias veces las escenas de las películas.
El predicado de una oración está formado por un verbo, que constituye el núcleo del predicado. Ser el núcleo del predicado es la función principal de los verbos.
El verbo puede ir acompañado de otros grupos de palabras, generalmente grupos nominales, que funcionan como complementos del núcleo verbal.